Es mi plato favorito en verano, refrescante, fácil de
hacer y saludable. Un tazón por la noche sienta de lujo.
Utilizo tomates "pera" porque son bastante
carnosos y así nos quedará más espeso pero muy fino. Espero que os guste!
Ingredientes
·
1kg de tomates "pera" maduros
·
4 rebanadas de pan de molde sin borde
·
1 diente de ajo
·
150 ml Aceite de oliva Virgen
·
Sal
Ø Para decorar:
·
1 huevo cocido
·
1 loncha de jamón serrano
Así
lo hago
1. Lavar bien los tomates
2. Cortarlos en cuartos
3. Introducir en un
recipiente hondo y triturar con batidora de mano
4. Pasar por el pasapurés
5. Añadir las rebanadas de
pan y el diente de ajo
6. Triturar con la batidora
7. Incorporar poco a poco
el AOVE mientras se sigue batiendo (como si hiciésemos mayonesa)
8. Sazonar al gusto
9. Dejar reposar en nevera
mín. 2 horas
Ø Para decorar:
1. Trocear el huevo cocido
2. Cortar en trocitos una
loncha de jamón serrano
3. Colocar los trozos bien
separados en un plato
4. Meter al microondas
durante 1-2 min
5. Conseguimos un jamón
crujiente
6. En un tazón o plato
añadimos el salmorejo y colocamos el huevo cocido y el jamón serrano por encima
7. Y listo para comer!
Valoración
nutricional (Por Lcdo. Alberto García, Experto en Nutrición y Planificación Dietética por la UCM)
Estamos ante uno de los platos estrella del verano. El salmorejo cordobés de
Alicia es, sin duda, una de las elaboraciones más saludables que hasta el
momento hemos presentado. Rico en vitaminas A, E, K, ácido pantonténico,
biotina, B6 y B12. Aunque en bajas proporciones, contiene minerales como
fósforo o cinc. Pero sobretodo, es destacable su contenido en fitoquímicos.
Éstos son compuestos bioactivos presentes en los alimentos de origen vegetal
capaces de provocar respuestas en tu organismo beneficiosas para la salud. Aún
se siguen investigando y hasta el momento se han descubierto decenas de miles
contenidos en diferentes alimentos de origen vegetal. En nuestro salmorejo de
hoy caben destacar el licopeno del tomate, ácidos fenólicos y esteroles del
a.o.v.e. y compuestos organosulfurados del ajo. Para no extenderme demasiado,
resumiré los beneficios de los presentes en el plato en los más destacados: su
papel antioxidante (que aumenta con la trituración del tomate), protector
contra el cáncer (sobretodo próstata y del aparato digestivo), reduce el colesterol
malo y con propiedades antibióticas.
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